Evangelismo y política en Brasil: la fuerza electoral del pentecostalismo

El 6 de octubre del 2024 el pueblo brasileño elegirá a alcaldes y concejales en todo el país.1 Estos comicios, en los que participarán 156 millones de personas en más de 5 mil municipios, serán un termómetro social de cara a las elecciones generales de 2026. El escenario electoral está marcado por la creciente polarización política que atraviesa Brasil y parece reducir los comicios a una contienda cerrada entre lulistas y bolsonaristas. Según múltiples encuestas, el primer mandatario, Luiz Inácio Lula da Silva, llega a la mitad de su gestión con una popularidad desgastada, mientras la derecha radical encabezada por el expresidente, Jair Messias Bolsonaro, procura afianzar la fila de simpatizantes.

En esta investigación nos enfocamos en un amplio sector de la sociedad brasileña cuyo peso político podría inclinar la balanza de manera decisiva: los cristianos evangélicos, especialmente los pentecostales: un grupo religioso en expansión que actualmente constituye un tercio de la población de Brasil. No es un grupo homogéneo ni simplemente un electorado por conquistar, sino un campo complejo desde el que se impulsan programas políticos y cuyas tendencias ideológicas y liderazgos han transformado el tablero político de varios países de la región. Este ensayo explora la expansión del evangelismo pentecostal en Brasil y analiza su entramado con el campo político-institucional, poniendo especial atención en el papel del empresariado religioso y en el peso que estos grupos tendrán en el futuro próximo de la economía más grande de América Latina.

Escenario político-electoral: Lulismo y bolsonarismo hacia los comicios de octubre

Las consultoras Genial/Quaest, AtlasIntel e Ipec muestran una caída en la popularidad de Lula da Silva: alrededor de 32% de los encuestados aprobaron su gobierno, mientras que un 38% lo desaprobó; en solo tres meses, de diciembre de 2023 a marzo de 2024, la percepción positiva de Lula bajó cinco puntos porcentuales y la negativa aumentó en promedio cuatro puntos.2 En una reciente entrevista en SBT News, el mandatario admitió que su gobierno no ha estado a la altura de lo prometido en la campaña electoral de 2022: “Hay que utilizar a las encuestas como un instrumento de acción y cambio de la estrategia de gobierno. Tengo certeza absoluta de que no tengo ninguna razón para que el pueblo brasileño me otorgue el 100% de aprobación”, precisó.3 Según los estudios, la seguridad pública, la corrupción política, el control de gastos públicos y la política exterior son los puntos débiles que empañan el desempeño del jefe de Estado.

El descenso en la popularidad de Lula no se traduce directamente en votos para el bolsonarismo, pero sí aumenta la incertidumbre sobre los resultados electorales que pueden esperar desde el Partido de los Trabajadores (PT) y sus aliados. Es importante recordar que en 2022 Lula ganó las presidenciales por un margen de menos de dos millones de votos, lo cual incitó a los bolsonaristas a tomar por asalto la Plaza de los Tres Poderes en Brasilia el 8 de enero de 2023. Este acto culminó con decenas de detenidos e investigaciones aún en curso a funcionarios públicos, empresarios nacionales y actores extranjeros por su colaboración en la imitación sudamericana de la toma del Capitolio en Washington un año antes. Además, en junio de 2023 el Tribunal Superior Electoral4 (TSE) declaró a Bolsonaro inelegible durante ocho años por abuso de autoridad política y uso indebido de los medios de comunicación en campaña electoral.

En el preludio de los comicios de octubre es evidente el intento del oficialismo de aumentar y medir su popularidad en las urnas como bloque contrincante del bolsonarismo. Conscientes de que estas elecciones son un preámbulo de las generales de 2026, Lula da Silva y el PT están respaldando ciertas candidaturas, perfilándolas como orgánicas aunque sean de otros partidos. Ello es claro en la región Sureste,5 un área electoral clave donde vive el 41.8% de la población y donde se localizan las dos ciudades más pobladas del país: São Paulo, con 11.5 millones de habitantes y Río de Janeiro, con 6.2 millones.6 En São Paulo, una reciente encuesta de Datafolha indica que quien lidera la contienda electoral es Guilherme Boulos (PSOL) con el 23% de las intenciones de voto; es el candidato, que además de contar con el apoyo de Lula, mantiene cierta estabilidad desde principios de año. En el campo de la derecha ligado al bolsonarismo el escenario cambió rotundamente: el actual intendente, Ricardo Nunes (MDB), está disputando codo a codo el liderazgo con Pablo Marçal (PRTB), que hasta junio estaba muy lejos de conseguir ingresar al balotaje, y en este último relevamiento general lo sobrepasó por dos puntos. Nunes cayó de 23% a 19% en tan solo dos meses y, en cambio, Marçal creció vertiginosamente, de 14% a 21% en el mismo periodo. Les sigue de cerca el periodista José Luiz Datena (PSDB) —10%— y Tabata Amaral (PSB) —8%—. En la segunda vuelta, que ya es un hecho, la intendecia paulista quedaría en poder de Nunes que aventaja a Boulos por 9 puntos: 47% a 38%, respectivamente. La distancia en el balotaje se resuelve, principalmente, por el apoyo a Nunes de dos segmentos: la franja etaria de 45 a 49 años (52% a 35%) y entre los evangélicos (54% y 24%).7 El pasado primero de mayo, durante un acto (casi vacío) por el Día del Trabajador, Lula llamó a votar por Boulos, a pesar de que las normas electorales prohíben pedir el voto en precampaña: el periodo oficial de campaña arrancó el 16 de agosto. Es importante mencionar que la mayoría de los partidos de centroderecha que fueron aliados del PT en las elecciones presidenciales de 2022 están presentando candidatos propios en las intendencias y han denunciado públicamente a Lula por infringir la legislación electoral.

En la ciudad de Río de Janeiro, el candidato bolsonarista es el diputado carioca Alexandre Ramagem, amigo de la familia Bolsonaro, quien ocupó el cargo de director general de la Agencia Brasileña de Inteligencia (ABIN) en la administración anterior. La ABIN es uno de los organismos más controvertidos de la gestión de Bolsonaro: según investigaciones judiciales y policiales, en la agencia se instaló un aparato de espionaje ilegal para monitorear a autoridades y diversas personas utilizando herramientas de geolocalización de dispositivos móviles sin la debida autorización del Poder Judicial. Con estos fines se implementó el software FirstMile de la empresa israelí Cognyte, adquirido por el gobierno del expresidente Michel Temer para utilizarse en la intervención federal de Río de Janeiro en 2018.8 El actual director de la Policía Federal, Andrei Rodrigues, aseguró que desde esta estructura paralela del servicio brasileño se espiaron a más de 30 mil opositores y que los datos recabados ilegalmente se almacenaron en una nube alojada en Israel.9

El contrincante de Ramagem en Río de Janeiro es el actual intendente, Eduardo Paes, del Partido Social Democrático (PSD). Según una encuesta de Genial/Quaest10 publicada a fines de julio, Paes lleva una amplia delantera con el 49% de intención de voto; Ramagem le sigue muy por detrás, con el 13%. Paes está buscando que los partidos ahora ligados al bolsonarismo en Río de Janeiro, como Unión Brasil, Partido Progresista y el Movimiento Democrático Brasileño se alineen a su campaña para los comicios de octubre. Este objetivo se vería obstaculizado si el PT logra imponer al compañero de fórmula electoral. Cabe resaltar que Paes cuenta con el apoyo de líderes evangélicos.

Es en este escenario que la población de credo evangélico y sus líderes cobran un papel político importante, no sólo como un cuantioso sector del electorado, sino también como fuerza política con presencia institucional y con un programa definido. La gran mayoría de quienes profesan el cristianismo evangélico en Brasil pertenecen a los sectores populares, bastión histórico de Lula da Silva y del PT. No obstante, en las últimas décadas —como se expone a continuación—, la conformación de un empresariado religioso y el acercamiento ideológico y cultural del evangelismo pentecostal hacia el conservadurismo han provocado conflictos y rupturas con los gobiernos lulistas, así como afinidades programáticas con el bolsonarismo.

El evangelismo pentecostal en Brasil: Breve historia y transformación

El catolicismo sigue siendo el principal credo religioso en Brasil, pero en las últimas décadas ha ido perdiendo terreno ante la vertiginosa adopción del evangelismo. En el 2000, más del 70% de los brasileños se identificaban como católicos y sólo un 15% como evangélicos. En 2010, el evangelismo alcanzó el 22.2% de la población, mientras que el catolicismo retrocedió al 64% —un descenso observado en todas las regiones e Brasil—.11 Proyecciones basadas en la serie histórica censal sugieren que para 2032 la población evangélica podría igualar a la católica y luego rebasarla.12 La vertiente pentecostal del evangelismo es la de mayor propagación: a ella se adscribe más del 60% de los evangélicos brasileños.13 Esta tendencia es el reflejo de una transformación religiosa global: según datos de la World Christian Database, se espera que en menos de treinta años uno de cada tres cristianos sea pentecostal.14

El pentecostalismo llegó a Brasil con el establecimiento de las iglesias Asamblea de Dios y la Congregación Cristiana alrededor de 1910.15 Su expansión comenzó hacia la segunda mitad del siglo y se agudizó a partir de 1980. Para fines de 1990, Brasil ya tenía la comunidad pentecostal más grande del mundo16 y hoy está entre los tres países de donde proviene el mayor número de misiones pentecostales internacionales.17 El sociólogo experto en religión David Martin explica que el pentecostalismo es un movimiento popular desde su origen, con una fuerte participación de los pobres y socialmente excluidos.18 En efecto, en el gigante sudamericano un tercio de los pentecostales brasileños viven en situaciones de marginalidad y son predominantemente (60%) negros y pardos.19 Según Martin, el pentecostalismo ofrece fuentes de solidaridad social para sectores desfavorecidos centradas en la revalorización personal y de la familia. Durante la segunda mitad del siglo XX, cuando millones de trabajadores rurales se trasladaron a las periferias urbanas, las iglesias pentecostales armaron redes de ayuda para evitar los rompimientos familiares por el creciente consumo de alcohol y drogas.

En las últimas décadas del siglo pasado, se desarrolló una nueva forma de pentecostalismo identificada por investigadores y académicos —no existe ésta denominación ni es un término utilizado por los creyentes— como neopentecostalismo. Los neopentecostales introdujeron un manejo empresarial de las iglesias en manos de sus fundadores y una nueva centralidad institucional de las mismas. La Iglesia Universal del Reino de Dios, fundada en 1977 por Edir Macedo, es la más representativa de esta vertiente pentecostal. En términos teológicos, el neopentecostalismo inculca dos importantes teologías complementarias: la “teología de la prosperidad”, vin­culada a una lógica meritocrática y de emprendedurismo en la cual Dios recompensa la devoción religiosa y la disciplina del fiel en sucesos materiales, y la “teología de la guerra espiritual”, según la cual en este mundo hay una guerra constante entre el bien y el mal, además de que se debe expulsar a los demonios que obstaculizan la prosperidad y la curación través de actos de exorcismo. Estas teologías tienen importantes implicaciones en el ámbito social y político.

La teología de la prosperidad neopentecostal es distinta de la ética protestante clásica. En ésta última, el trabajo diligente es visto como vocación: el llamado de Dios a aquellos predestinados a la salvación, al tiempo que se sigue una vida disciplinada y frugal (especialmente en la corriente calvinista); la prosperidad material y la acumulación de dinero pueden resultar de esta ética, pero no son fines perseguidos en sí mismos.20 En contraste, para los neopentecostales, el ascenso económico es la recompensa de Dios por la devoción religiosa, de manera que la riqueza es vista como resultado de la comunión con Dios y la virtud personal. La desigualdad, en consecuencia, se interpreta bajo una perspectiva meritocrática como la traducción material de diferencias entre personas más y menos devotas, más y menos virtuosas o capaces. El neopentecostalismo promueve formas de superación personal desde la autoayuda y el emprendedurismo, orientándose hacia los negocios y el lucro personal.21 En el sector de la juventud, las iglesias neopentecostales también ofrecen una alternativa a la moral rígida del pentecostalismo: ambientes más modernos en los cuales suena música pop adaptada, la moda está permitida y la austeridad, promovida por iglesias más tradicionales como la Asamblea de Dios, no es en lo absoluto una exigencia divina.

En cuanto a la segunda teología, referida a la “guerra espiritual”, la batalla entre el bien y el mal se libra tanto a nivel personal como en el ámbito de lo público y, por supuesto, del Estado. En el campo individual, se traduce en el rechazo firme del pecado y en la liberación del demonio del cuerpo de la persona maldita mediante el cambio de patrones de conducta o, en extremos, del exorcismo. Pero esto es transferible a la esfera pública, donde expulsar el mal es visto como un deber moral y religioso. El avance de esta teología neopentecostal ha llevado a millones de personas a concebir al Estado como un campo de guerra santa, y a movilizarse en el ámbito público bajo esta orientación religiosa. Este ideario se remonta a la Teología o Profecía de los Siete Montes, la cual habría sido revelada en 1975 a dos estadounidenses de forma separada: a Loren Cunningham, fundador de Jocum —entidad misionera que en Brasil se dedicó a evangelizar indígenas— y a Bill Bright, evangélico del Campus Crusade for Christ —organización de alcance global—. Ambos dijeron haber recibido una lista con las áreas en las cuales los evangélicos se debían involucrar con el propósito de “formar naciones para Cristo” y “tomar el territorio de Satanás en oración”. Bajo esta teología se llama a los cristianos a manifestar el Reino de Dios en siete esferas de la sociedad: religión, educación, familia, gobierno, economía, arte y entretenimiento. La periodista brasileña especializada en religión, Anna Virginia Balloussier, caracterizó la Teología de los Siete Montes como una visión estratégica para alcanzar el ideal de la supremacía evangélica.22

Nota sobre el evangelismo digital

En la nueva ola pentecostal, las redes sociales han sido fundamentales para difundir el mensaje cristiano en Brasil y el mundo, y para amplificar la prédica en el ámbito virtual. A mediados del año pasado, la consultora especializada en religión Nosotros publicó una encuesta que revela la gran presencia de perfiles evangélicos en redes sociales y su éxito entre la audiencia digital:23 los resultados listan 44 influencers evangélicos con al menos 2 millones de seguidores en Instagram. Algunos influencers brasileños, como el pastor Tiago Brunet y la actriz Bruna Hamú, han ido aumentando su presencia en el medio asociando la prédica religiosa con el discurso motivacional y de coaching. Otro exponente de esta tendencia es Claudio Duarte, presidente del Consejo de Pastores y Ministros Evangélicos en el estado de Río de Janeiro. Duarte tiene más de 6.7 millones de seguidores en Instagram, 3 millones en su canal de Youtube y 3 millones en Facebook, superando a otros pastores célebres como Silas Malafaia. Durante la pandemia, Duarte duplicó su alcance en redes sociales. El pastor, cercano al senador Flávio Bolsonaro, no tiene reparos en atacar a los opositores del bolsonarismo en medios digitales.

Las mujeres han sido centrales en el nuevo evangelismo digital: la cantante Eyshila, de la Iglesia Asamblea de Dios Vitória em Cristo, y la ex primera dama Michelle Bolsonaro, tienen gran popularidad en las redes sociales, superando a varios pastores famosos. La investigación de Nosotros muestra varios perfiles femeninos en el “top 10” de los denominados “mega influencers” por la cantidad de conexiones directas con otras cuentas y el número de seguidores que tienen. Según la investigación citada, una cuarta parte de los influencers hacen referencia a cuestiones políticas en sus redes.

El evangelismo en la política brasileña

La imbricación entre evangelismo y política se institucionalizó en 1987 con la creación de la Bancada Evangélica en el Congreso Nacional brasileño. Por primera vez, los evangélicos votaron masivamente a 33 diputados para conformar el frente parlamentario que los representaría en la Asamblea Nacional Constituyente, encargada de redactar una nueva carta magna tras la dictadura que abarcó de 1964 a 1985. Este grupo parlamentario quedó a cargo de dos importantes subcomisiones: Ciencia, Tecnología y Comunicación, responsable de las concesiones a televisoras y radios; y Familia, Menores y Enfermos, desde la cual se detendría el avance de múltiples políticas progresistas. En ambas subcomisiones, el bloque evangélico logró imponer su agenda: desde la primera, por ejemplo, favoreció a la empresa MK Music, abocada a grabar música gospel, que creció hasta convertirse en el Grupo MK de Comunicación, el más grande del sector; desde la segunda, logró frenar el acceso legal a la interrupción voluntaria del embarazo, la cual sigue penalizada hasta la fecha (excepto en causales específicas).

Pero los evangélicos no han sido mayoritariamente una fuerza alineada con partidos políticos de derecha. Aunque se posicionan con homogeneidad respecto a algunos temas de la agenda pública, también es cierto que siguen orientaciones políticas disímiles. Por ello es un error pensar a la población evangélica como un bloque monolítico o como un “rebaño” que actúa en conjunto. La gran mayoría de los evangélicos se ubican en la base de la pirámide social de Brasil, de donde ha provenido el mayor caudal de votos para Lula da Silva. De hecho, durante los primeros gobiernos de Lula (2002-2010) hubo una comunicación fluida con este sector religioso. El gobierno de Dilma Rousseff (2010-2016) también contó en sus inicios con el apoyo de ciertos grupos y líderes pentecostales, como el pastor Everaldo Pereira, importante miembro de la Asamblea de Dios, quien ayudó en la coordinación de su campaña; o el del exministro de Pesca, Marcelo Crivelli —sobrino de Edir Macedo, líder y fundador de la neopentecostal Iglesia Universal del Reino de Dios, conocida también como “Pare de Sufrir”—, luego alcalde de Río de Janeiro.

Sin embargo, fue durante la administración de Rousseff que la relación con los evangélicos cambió de rumbo: las agendas difirieron al punto de colisionar; unir en un mismo frente el conservadurismo evangélico con el progresismo del PT resultó imposible. En la contienda electoral de 2014 más del 50% del electorado evangélico24 apoyó al socialdemócrata Aécio Neves luego del episodio conocido como kit gay, nombre que se dio a una campaña audiovisual para impartir educación sexual en las escuelas públicas del país, anunciada después de que el Supremo Tribunal Federal diera luz verde a la unión civil de parejas homosexuales. Un actor fundamental en esa operación de desprestigio y desinformación contra la campaña educativa fue el diputado Eduardo Cunha, miembro de la Iglesia Asamblea de Dios, promotor del juicio político contra Rousseff y pre­sidente de la Cámara de Diputados de 2015 a 2016. Bolsonaro, que en ese momento era legislador, sostuvo que el gobierno estaba incentivando la homosexualidad.

El viraje político del sector evangélico se cristalizó en el apoyo a la candidatura de Jair Bolsonaro en 2018. El descrédito que cubrió al sector político derivado de la “Operación Lava Jato” (una investigación por lavado de dinero y corrupción iniciada en 2014), los efectos de la crisis económica y los problemas de seguridad pública contribuyeron a que las congregaciones pentecostales simpatizaran con el nuevo candidato. El poderoso líder pentecostal Silas Malafaia, principal figura de la Asamblea de Dios —la congregación que más rápido ha crecido en Brasil en las últimas décadas,25 con 12 millones de fieles26— afirmó que los pastores habían visto el potencial político de Bolsonaro por la simpatía que generaba entre los fieles. El mismo año, Macedo respondió a la pregunta en Facebook sobre su postura frente a las elecciones nacionales: “Es Bolsonaro”.27 El candidato se había acercado al brazo poderoso del pentecostalismo al contraer terceras nupcias con Michelle Reinaldo, evangélica de la iglesia Bautista Actitud, en una ceremonia presidida por Malafaia en 2013. Tres años después, su vínculo con los líderes evangélicos se consolidó con el bautismo simbólico que Everaldo Dias Pereira, pastor y líder del Partido Social Cristiano (detenido en 2020 por corrupción),28 realizó a Bolsonaro en el Río Jordán, en el que habría sido bautizado Jesús. Así, sin dejar de profesar el catolicismo, Bolsonaro fue bautizado como evangélico el 12 de mayo de 2016, el día en que el Senado autorizó el juicio político a Dilma Rousseff.

En las elecciones de 2018, un 70% de los cristianos evangélicos —aproximadamente 21 millones— votaron por Bolsonaro.29 Varios analistas consideraron que este apoyo fue determinante para su triunfo: el doctor en demografía y profesor titular de la Escuela Nacional de Ciencias Estadísticas (ENCE/IBGE), José Diniz Alves, sostuvo que “no hay dudas de que el voto evangélico fue fundamental para la elección de Bolsonaro… Los liderazgos evangélicos son muy activos en la política y están recolectando el resultado de años de activismo religioso en la sociedad”.30

No obstante, el voto evangélico que en 2018 respaldó masivamente a Bolsonaro estuvo dividido en las elecciones de 2022. Esto fue resultado de las políticas económicas bolsonaristas que golpearon a los sectores populares y del discurso público del presidente, percibido, especialmente por las mujeres, como extremadamente violento. En respuesta, los líderes de uno de los brazos más poderosos del evangelismo, congregado en la Convención Fraternal de las Asambleas de Dios del Estado de São Paulo (Confradesp), lanzó una amenaza a los fieles: en un comunicado publicado el 4 de octubre de 2022, la Convención anunció el acuerdo de “aplicar medidas disciplinarias” a miembros de la congregación que tuvieran “una cosmovisión contraria al evangelio y a los preceptos éticos y morales defendidos por la Iglesia Evangélica Asamblea de Dios”.31 El texto listó como posicionamientos “contrarios” a la moral cristiana la deconstrucción de la familia tradicional, la legalización del aborto, las ideologías de género, la liberalización de las drogas y la educación e ideología marxistas. “Los ministros que comprobadamente defiendan pautas de izquierda dentro de la cosmovisión marxista deberán acudir ante el Consejo de Ética y Disciplina para argumentar su defensa”, expresó el documento. Con ello, la congregación condenó religiosamente el apoyo electoral y político de la agenda progresista y presionó al electorado evangélico a alinearse con el bolsonarismo.32

Sobre esta misma línea, durante la campaña para los comicios municipales del 2020, Silas Malafaia expresó que “la ciudadanía en el cielo no anula la ciudadanía terrenal” y que es preciso entonces “interpretar correctamente la Biblia cuando Jesús habla de ‘dar al César lo que es de César y a Dios lo que es de Dios’”. A partir de esta analogía, Malafaia pidió a sus seguidores salir a votar para impulsar a gobernantes que “defiendan los valores cristianos”. Posteriormente, promovió la idea de un supuesto fraude en las elecciones presidenciales de 2022, atizando el caldo de cultivo de la violencia política que se vivió poco tiempo después. El domingo antes de las elecciones, desde el templo de Río de Janeiro, se dirigió a los feligreses —en vivo y por streaming— y los llamó a votar por candidatos afines a los principios y valores de los evangélicos: “¡Que Dios nos libre del fraude!”. Este año, en respuesta a las diversas investigaciones que involucran a Bolsonaro,33 Malafaia argumentó, con la bandera de Israel colgada en la espalda,34 que Brasil está “cerca de una dictadura” y declaró que la toma de la Plaza de los Tres Poderes en Brasilia en 2023 fue estratégicamente utilizada para “crear una narrativa” en contra del expresidente, y que Lula, al que tachó de terrorista amigo del grupo proislamista palestino Hamás, sabía todo lo que iba a suceder esa tarde en la capital del país.

Pentecostalismo y crimen organizado

Un fenómeno que ha cobrado visibilidad y está siendo investigado en varios estados de Brasil es la apertura de iglesias pentecostales para lavar dinero. Por citar un ejemplo, pues los casos abundan, a principios del año pasado el Ministerio Público de Río Grande del Norte (MPRG) identificó a Valdeci Alves dos Santos como integrante del Primer Comando de la Capital (PCC) —grupo criminal nacido en el sistema penitenciario brasileño35— y lo acusó de blanquear más de 23 millones de reales (4 millones de dólares) provenientes del narcotráfico en la apertura de siete iglesias pentecostales.36 Las investigaciones del caso comenzaron en 2019, pero el esquema de lavado de dinero tendría dos décadas funcionando.

El exdiácono de la Iglesia Universal del Reino de Dios y actual presidente del Movimiento Favela Nao se Cala, André Constantine, explicó por qué es factible lavar dinero en las iglesias neopentecostales: “Cualquier persona sabe que los templos están exentos de impuestos: ningún templo religioso contribuye con impuestos al Estado brasileño. Este es el punto de partida que viabiliza que se lave dinero del narcotráfico, del juego, de los políticos y de las milicias. Son el mejor lugar para efectuar este delito en Brasil”.37 También aseguró que el PCC y el Comando Vermelho, las dos facciones criminales de carácter transnacional más importantes de Brasil, abren iglesias para el lavado de activos: “Los dos grandes problemas de las favelas en Brasil son las milicias y las iglesias neopentecostales porque ambas hacen parte de un proceso político perteneciente a la ultraderecha fascista. Solo lograremos derrocar ese proyecto cuando la izquierda brasileña deje de ser electorera, burocrática y reformista”.38 Asimismo, subrayó que muchos templos operan con fines de lucro, como si fueran empresas, y describió a Silas Malafaia como uno de los mayores sinvergüenzas del país.

Actualmente, las iglesias y los templos religiosos brasileños siguen exentos de pagar impuestos porque entran en el esquema de inmunidad tributaria establecido en el artículo 150 de la Constitución. El caso es distinto para los ingresos percibidos por líderes religiosos, como ministros y pastores, aunque el bolsonarismo ha buscado extenderles este mismo beneficio. En 2022, a poco de iniciar el periodo electoral, el gobierno de Jair Bolsonaro aprobó una norma que otorgaba exención fiscal a líderes religiosos, argumentando que los ingresos percibidos por donaciones, diezmos o cualquier otra fuente no condicionada a una cantidad y calidad de trabajo no podían considerarse “remuneración”.39 Esto produjo un impacto negativo en las arcas públicas de aproximadamente 300 millones de reales (59 millones de dólares). Dicha norma fue revocada por el Ministerio de Hacienda en enero de este año, lo cual causó gran disgusto entre los líderes religiosos.

Es importante mencionar que el vínculo entre crimen y pentecostalismo no obedece únicamente a fines delictivos: el pentecostalismo es genuinamente practicado por amplios sectores de la población penitenciaria en Brasil, así como por grupos delictivos.40 El sociólogo experto en religión, Andrew Johnson, explica que el evangelismo ofrece a los presos, así como a las hermandades criminales, una forma de resistir las presiones cotidianas en un mundo “dividido entre el bien y el mal”.41 La fraternidad religiosa también les da acceso a espacios exclusivos en los penales y les provee una identidad y poder de acción colectivas, una “lealtad de soldados en el campo de batalla”. Los mismos presos creyentes se vuelven emisarios de la palabra de Dios dentro de las redes penitenciarias. La etnógrafa Christina Vital ha registrado la creciente influencia del evangelismo pentecostal en el mundo del crimen organizado en las favelas de Río de Janeiro, donde el culto evangélico es parte permanente de la cultura popular.42

La estrategia lulista en busca del voto evangélico

Como hemos expuesto, la derecha brasileña no ha contado siempre ni automáticamente con el respaldo de la población evangélica. Si bien hay una línea asociada a la derecha conservadora en el liderazgo religioso y en la teología neopentecostal, también hay grupos y líderes evangélicos que apoyan al PT; además, los efectos negativos de las políticas sociales y económicas del bolsonarismo han hecho mella en el apoyo popular con el que contaba la derecha. Actualmente, al oficialismo lo respalda más de una tercera parte de los evangélicos; por lo tanto, la cuestión de cara a las próximas elecciones para el lulismo es cómo mantener ese apoyo y reconstruir vínculos con los sectores evangélicos que no se sienten representados por el bolsonarismo y los líderes eclesiásticos.

En marzo de este año, la consultora Quaest publicó los resultados de una encuesta sobre cómo la población evangélica evalúa la gestión de Lula da Silva: el 35% de los entrevistados dijeron aprobar el trabajo presidencial, mientras que un 62% lo evaluó como malo o pésimo. La desaprobación creció seis puntos porcentuales desde el levantamiento de la encuesta anterior, en diciembre de 2023, cuando se ubicaba en 56%.43 Unos días después de publicarse estos resultados, el gobierno de Lula lanzó un nuevo eslogan: “Fe en Brasil”, lema que se asemeja a la estrategia comunicacional efectivamente inaugurada por Bolsonaro, con la consigna “Brasil por encima de todo, Dios por encima de todos”.

La nueva propaganda política del gobierno se centra en los ejes de economía, educación, salud y agro, y hace hincapié en la recuperación económica de Brasil: “La gente puede pensar diferente, pero en esto el brasileño concuerda: cuando la economía mejora es bueno para vos, para tu familia y para todo el mundo. Esto es solo el comienzo, hay mucho trabajo por delante. Fe en Brasil, la gente está en el camino correcto”, dice el narrador del comercial.44 Desde el oficialismo se ha negado que la campaña, que durará seis semanas, sea una estrategia para acercarse al segmento evangélico y se argumenta que, más bien, busca demostrar que la gestión del PT respeta la fe de todos los ciudadanos brasileños.

También se ha incorporado el lenguaje religioso al discurso del presidente. En un acto reciente en el estado de Pernambuco, Lula usó numerosas expresiones religiosas, hizo referencias a Dios y usó la palabra “milagro”, en promedio, más de una vez por minuto. El cambio fue notorio: por lo general, solía utilizar esos dos términos una sola vez en cada discurso. En Pernambuco, en contraste, Lula hizo 11 referencias a Dios, dijo 16 veces “milagro” y cinco veces “fe” en una disertación de 25 minutos.45 “Sólo puede acontecer ese milagro por causa de la fe de ustedes, por causa de la fe, por causa de la creencia de ustedes. Si no hubiesen creído, si no tuvieran fe, jamás hubieran votado como presidente de la República a un pernambucano que no tiene diploma universitario, que solo tiene un diploma del primario y un curso del Senai”, afirmó el primer mandatario.

Lula cuenta con el respaldo de algunos líderes evangélicos, como el pastor Marcelo Schallenberger, de la Asamblea de Dios de Foz de Iguazú. Schallenberger participó en la campaña de 2022 con el objetivo de reconstruir puentes entre la población evangélica y Lula. El pastor plantea que para lograr este fin deben evitarse los contactos con grandes líderes como Macedo o Malafaia y, en cambio, realizar un trabajo descentralizado con pastores que tengan presencia directamente en las iglesias. Schallenberger calificó la participación evangélica en el gobierno de Bolsonaro como “inusitada”: “El estado laico es una victoria civilizatoria. Ninguno de nosotros esperaba que el gobierno tuviera alguna tendencia religiosa pero lamentablemente sucedió de la forma más antidemocrática, manipuladora y triste que existe”, expresó.46

El Frente Parlamentario Evangélico del Congreso Nacional, con fuerte presencia legislativa, también está dividido en cuanto a sus alineaciones políticas, aunque tiende al bolsonarismo. Actualmente se compone de 228 legisladores en ambas cámaras: 202 diputados (de 513) y 26 senadores (de 81) de 15 partidos diferentes.47 Únicamente 26 congresistas son aliados oficialistas, mientras que 119 respaldan a Bolsonaro; los restantes 83 se declaran independientes (Ver Gráfico 1 y Gráfico 2). En la última década, el bloque parlamentario ha optado por el pragmatismo y ha actuado de forma homogénea en cuestiones estratégicas que se colocan por encima de los encuadres ideológicos.48 Aunque mediáticamente han priorizado las agendas relacionadas con derechos humanos, mujeres, educación y familia, los esfuerzos centrales del bloque se han concentrado en ocupar espacios en comisiones relacionadas con seguridad, economía y medios de comunicación.

Gráfico 1. Congresistas evangélicos
Gráfico 2. Senadores evangélicos

El bolsonarismo tras la inelegibilidad: ¿Tarcísio de Freitas o Michelle Bolsonaro?

Frente a la inelegibilidad de Bolsonaro, inhabilitado para contender en elecciones hasta 2030, la pregunta es quién será el candidato o candidata de la derecha que se enfrente en 2026 al eventual intento de reelección de Lula, que tendrá 81 años para entonces. Hasta ahora, el nombre más sonado es el de Tarcísio de Freitas, gobernador de São Paulo y exministro de Infraestructura en el gobierno de Bolsonaro, del partido Republicanos asociado a la Iglesia Universal del Reino de Dios. El entonces primer mandatario respaldó su candidatura para gobernar el estado más rico y poblado de Brasil —si fuese un país, sería la vigésima primera economía del mundo—, contienda en la que triunfó con holgura. De Freitas, católico, es abiertamente conservador en lo social y liberal en lo económico. No obstante, como líder del ejecutivo paulista, De Freitas conformó una administración heterogénea. De hecho, De Freitas suele decir que “al pobre poco le importa si el gobernador es de derecha o de izquierda, lo que quiere es que ofrezca soluciones para los problemas que enfrenta en su vida diaria”. Parece que cuanto más cerca del bolsonarismo, cobrando fuerza como el potencial heredero del expresidente, la estrategia de pregonar una postura más pragmática ha ido perdiendo peso. En la movilización bolsonarista realizada en São Paulo, en febrero de este año, De Freitas estuvo presente junto a otros cuatro gobernadores e hizo una calurosa defensa del expresidente, asegurando que ya no es solo una persona, sino la representación de un movimiento. No obstante, a diferencia de los demás oradores que siguieron una línea dura de crítica al oficialismo y a las instituciones, Tarcísio se enfocó en los “logros” de la gestión de Bolsonaro.

También se vislumbra la posible candidatura de Michelle Bolsonaro. De hecho, es ella quien tiene mejores resultados en las encuestas como sucesora de su marido. Es miembro del Partido Liberal (PL) y responsable del PL Mujer, un sector del partido importante en el campo evangélico y mediante el cual ejerce un gran magnetismo. Michelle Bolsonaro fue la primera oradora en el reciente acto opositor masivo de São Paulo, donde habló a favor de suprimir el Estado laico argumentando que “el mal ocupó el país”: “Ha llegado el momento de la liberación. Padre, nosotros te amamos y te pedimos que el Señor establezca su reino en Brasil”, pronunció frente a miles de brasileños, a quienes denomina “el Ejército de Dios”. Al igual que otros oradores, hizo una fuerte defensa de Israel en nombre de Jesús.49 (Ver Nota 1: La relación del pentecostalismo con el estado de Israel).

Una encuesta de Paraná Pesquisas muestra que la exprimera dama y el gobernador de São Paulo son quienes tienen más posibilidades como contrincantes electorales de Lula.50 En un escenario con Michelle Bolsonaro como contendiente, la exprimera dama registra un 38.7% de intenciones de voto, mientras que el actual mandatario alcanza un 45.4%; en un escenario con el gobernador paulista como candidato, éste suma 34.6%, mientras que Lula obtiene el 45.8%. Un dato importante es que dos de cada tres mujeres votaron por Lula en 2022; la figura de Michelle está orientada, entonces, a la con­quista del electorado femenino.

Consideraciones finales

Durante los últimos cuarenta años, lo político y lo religioso se han imbricado de manera más profunda en el Estado y la democracia de Brasil. Desde hace varios años, el evangelismo, especialmente en su vertiente pentecostal, se ha convertido en una fuerza política considerable, no sólo como un electorado en expansión, sino también como un bloque con presencia institucional, económica y mediática (Ver Anexo Anexo 1. La élite pentecostal brasileña: cinco líderes millonarios). El capital religioso es en la actualidad una forma de capital político que, si bien ha sido cultivado y aprovechado por la ultraderecha brasileña, no deja de ofrecer un potencial que Lula y su equipo no pueden ignorar.

Como hemos visto, el viraje del evangelismo brasileño hacia el bolsonarismo tiene que ver en buena medida con la transformación del pentecostalismo clásico hacia el neopentecostalismo, promotor de teologías e idearios afines al discurso neoliberal y conservador, y con el surgimiento de corporaciones religiosas de corte empresarial y líderes vinculados con fuerzas políticas de extrema derecha que han difundido sus iglesias justamente en las bases sociales del lulismo: los sectores populares. Estos líderes religiosos no sólo han encontrado afinidades ideológicas en la ultraderecha brasileña, también han impulsado un programa político propio, cultivando el respaldo de los fieles en el ámbito público mediante la prédica religiosa. Sus posturas y su agenda en materia de liberalización de las drogas, aborto legal y matrimonio igualitario son claros ejemplos de ello. Sin duda, otro factor insoslayable que contribuyó al crecimiento del evangelismo pentecostal es el corrimiento de la agenda del PT y aliados hacia un campo progresista que desatiende gran parte de las expresiones culturales populares del país.

La estrategia de campaña de Lula en preparación para las elecciones de octubre ha sido, por una parte, “nacionalizar” la contienda para medir y promover su candidatura para 2026. Al acercarse a determinados municipios claves y mostrar su apoyo directo a candidatos de ciertos partidos, fortalece la coalición y evita el surgimiento o avance de jugadores sueltos: la contienda es entre lulismo y bolsonarismo, y se juega desde este año. Por otro lado, el presidente ha incorporado un cierto ethos pentecostal en su discurso para disputarle a la derecha los votos cristianos, un ejercicio que podría provocar rupturas dentro del oficialismo, en el que conviven fuerzas de izquierda y progresistas que apuestan por otra agenda.

El primer mandatario se ha movido de forma pragmática a lo largo de su carrera política, por lo que cabe preguntarse si la fórmula presidencial de Lula para 2026 podría incluir a un evangélico. En 2002 y 2006 incorporó al empresario textil José Alencar como un guiño a los sectores económicos más poderosos del país. Como Alencar pertenecía al Partido Liberal, la alianza encontró resistencia dentro de la Iglesia Universal, fuerza importante de ese partido; lo mismo sucedió al interior del PT, donde muchos se oponían a la alianza con el sector de centroderecha. Más cercana en el tiempo, la impensada fórmula electoral de Lula y Geraldo Alckmin que triunfó en 2022: Alckmin, una figura histórica del Partido Socialdemócrata Brasileño (PSDB), derrotado por Lula en los comicios de 2006, miembro del Opus Dei, apoyó el juicio político contra Dilma Rousseff y acusó al actual jefe de Estado de ser un criminal: hoy, es su vicepresidente. Así pues, no sería improbable que Lula procure una alianza estratégica para acercarse a la población evangélica. El peso político de este sector, especialmente del pentecostalismo, podría ser decisivo para inclinar la balanza electoral en 2026.

En Brasil, el evangelismo pentecostal se ha difundido y fortalecido políticamente con especial rapidez, pero el caso del gigante sudamericano refleja una tendencia que recorre a Latinoamérica, donde se observa el avance gradual del evangelismo y también su creciente presencia política: en Centroamérica ya es el grupo religioso más numeroso.51 En la región en su conjunto, aproximadamente dos tercios de los protestantes se identifican como pentecostales.52 Tanto en el Perú de Dina Boluarte como en el Salvador de Nayib Bukele o de modo incipiente en la Argentina de Javier Milei, los sectores evangélicos vienen ganando terreno tanto en cantidad de fieles como en apoyos políticos.

Otros ejemplos de la dimensión política del fenómeno son la victoria en primera vuelta electoral del diputado evangélico Fabricio Alvarado en Costa Rica, en 2018, bajo una agenda de recalcitrante rechazo a iniciativas como el matrimonio homosexual y la interrupción legal del embarazo; o la forma en que Jeanine Áñez entró en 2019 con la Biblia en mano a la sede de Gobierno tomado por el golpe de Estado, presentándose al mismo tiempo como católica y evangélica, y arremetiendo contra la religiosidad de las comunidades indígenas de Bolivia —actualmente, está condenada por la justicia boliviana—; o la recolección de firmas por parte de iglesias evangélicas en Cuba en contra de la reforma constitucional que en 2018 legalizaría el matrimonio homosexual.53

Sin embargo, como hemos mostrado para el caso de Brasil, no hay un “voto evangélico” homogéneo que se movilice en bloque; aunque la derecha haya capitalizado el ideario religioso, los sectores populares evangélicos tienen razones de peso para apoyar agendas progresistas encaminadas a la justicia y la equidad sociales. Casos como el de la alianza entre Morena y el Partido Encuentro Social (PES) en 2018 en México, así como el apoyo de sectores evangélicos al proyecto de Andrés Manuel López Obrador son muestra de que esta colaboración es posible y cada vez más importante. El reto, en efecto, será navegar las tensiones entre las agendas izquierdistas y el conservadurismo religioso. Más allá del caso brasileño y mirando hacia un futuro más amplio, la izquierda tendrá que tejer una interlocución con el campo evangélico, no sólo para cultivar su apoyo político, sino también para evitar que se vuelva el combustible de la derecha antidemocrática en la región.

Anexo 1. La élite pentecostal brasileña: cinco líderes millonarios

Silas Malafaia

Es el líder de la Asamblea de Dios Vitória em Cristo. Se formó en psicología, es teleevangelista y presidente de la editorial Central Gospel. Además, es el vicepresidente del Consejo Interdenominacional de Ministros Evangélicos de Brasil (CIMEB), entidad que congrega a más de ocho mil pastores de distintas vertientes de todo el país. Es profundamente carismático y utiliza estrategias de comunicación y marketing para difundir la Asamblea de Dios. En 2017 la Policía Federal acusó a Malafaia por lavado de dinero en el marco de la “Operación Timóteo”, una investigación sobre corrupción de regalías provenientes de la actividad minera.54 El pastor argumentó que recibió una donación en formato de cheque que depositó en su cuenta, por lo que no estaba incurriendo en ningún delito.

Malafaia fue el primer pastor en mostrarse abiertamente bolsonarista. Desde 2004, su amistad personal con el expresidente es de conocimiento público. En declaraciones y actos públicos ha atacado a las instituciones democráticas brasileñas; ha utilizado el apoyo de su congregación especialmente para presionar y deslegitimar al Supremo Tribunal Federal bajo el argumento de que “el Supremo es el pueblo”. En varias ocasiones declaró que nunca entraría en la política, ya que fue diseñado “para influir y no para ser dirigente”.55

Este año, Malafaia estuvo al centro de dos actos multitudinarios convocados por Bolsonaro en São Paulo y Río de Janeiro. El primero, realizado a fines de febrero en la Avenida Paulista, fue financiado por el pastor “de su propio bolsillo” —en un inicio, dijo que lo pagaría con dinero de la iglesia que lidera, lo cual ocasionó un escándalo, de modo que terminó por asegurar que el desembolso fue personal—. Dos meses después se realizó el evento de Copacabana, sobre el cual declaró que únicamente estaba “organizándolo” y que el costeo, esta vez, saldría de otro lado.

Edir Macedo Bezerra

Desde hace más de una década figura en la lista de Forbes como uno de los hombres más ricos de Brasil, poseedor de una fortuna superior a los dos mil millones de dólares que incluye propiedades por todo el mundo. Es líder y fundador de la Iglesia Universal del Reino de Dios (conocida también como “Pare de Sufrir”), congregación presente en Brasil, Estados Unidos, Reino Unido, España, Argentina, Chile y algunos países de África. Macedo fue cajero de la Lotería de Río de Janeiro antes de fundar su iglesia en 1977, que ha ido ampliando con el paso de los años. La estructura de esta Iglesia es jerárquica: en la cima se encuentra el propio Macedo, luego siguen los Obispos (Brasil cuenta con un Obispo por estado), los pastores de las iglesias y, en el último escalón, los denominados “obreros”, quienes reciben a los nuevos feligreses.56

Desde 1989 Macedo es dueño de la emisora de televisión RecordTV —la segunda más importante de Brasil después de Globo— y de la estación de radio Rede Aleluia. Entre las acusaciones que se le han imputado a Macedo y a su iglesia destacan las siguientes: en 1992 fue acusado de enriquecerse a costa de personas vulnerables y exonerado al poco tiempo; en 1996 se le investigó por fraude en manejo de divisas; en 2009 fue acusado de fraude y lavado de dinero por apropiación de millones de dólares en donaciones recibidas por su iglesia para fines de caridad, posteriormente fue exonerado.57 En 2005 la Iglesia Universal fundó el Partido Renovador Municipalista, luego Partido Republicano Brasileño, hoy denominado Republicanos, para desvincularse del Partido Liberal que integraba la coalición del gobierno de Lula da Silva. Este partido llevó al católico y después feligrés de la Iglesia Universal, José Alencar, a reelegirse como vicepresidente en 2006.

Vladimiro Santiago

Es el líder de la Iglesia Mundial del Poder de Dios. Durante dieciocho años fue miembro de la Iglesia Universal del Reino de Dios, de la que fue expulsado en 1998 por diferencias en cuestiones de liderazgo, tras lo cual fundó la Iglesia Mundial del Poder de Dios, absorbiendo a miembros de la Iglesia Universal. En la actualidad cuenta con más de seis mil templos distribuidos por todo Brasil, aunque la mayoría se encuentran en el estado de São Paulo.

En 2017 fue atacado durante un servicio en Brás, la zona sur de São Paulo. El ataque fue transmitido en vivo, pues el evento estaba siendo televisado. La policía de São Paulo apresó al atacante al poco tiempo; según algunas fuentes, pertenecía a su misma Iglesia.58 Santiago realizó una transmisión desde el hospital para tranquilizar a sus fieles y dijo que perdonaba a su agresor.

En 2023 enfrentó 15 condenas, todas ellas en primera instancia por el Tribunal de Justicia de São Paulo y relacionadas con deudas por más de 2.5 millones de reales (471,698 dólares) con propietarios de inmuebles alquilados por su Iglesia como templos, casas de pastores y estacionamientos.59 También fue condenado a pagar 35 mil reales al gobernador de Bahía, Rui Costa, por daños morales, pues afirmó que Costa, del PT, había hecho un “pacto con el diablo”.

Quizás el mayor escándalo que protagonizó Vladimiro Santiago fue el relacionado con la venta de frijoles y judías supuestamente milagrosos durante la reciente pandemia. En 2021, a pocos días de que comenzara la campaña de vacunación, el pastor promovía dicho producto como método para combatir los síntomas del Covid-19 a un precio de 150 euros. El ministro de Salud en ese entonces, Eduardo Pazuello, dijo que el predicador desobedeció la orden de detener la falsa publicidad.

Romildo Ribeiro Soares

Es pastor, teleevangelista, empresario, abogado, escritor y cantante. Fundó la Iglesia Internacional de la Gracia de Dios en 1980, inaugurada en la Ciudad de Duque de Caxias, Río de Janeiro, la cual lidera desde entonces. Es especialmente conocido por ser el presentador del programa televisivo Show da Fé. Es cuñado de Edir Macedo, con el cual fundó el ministerio Cruzada do Caminho Eterno, ministerio ya disuelto que realizaba servicios evangélicos en Río de Janeiro en la década de los setentas. En 2020 su iglesia reportaba tener más de 1.5 millones de fieles en Brasil y Estados Unidos. Según la revista Forbes, su fortuna asciende a $736 millones de reales (139 millones de dólares), convirtiéndolo en unos de los cuatro pastores más ricos de Brasil.

Estevam Hernandes Filho

Es el líder de la Iglesia Renacer en Cristo y considerado el “Apóstol” de la misma. Formado en publicidad, trabajó en empresas privadas como Itautec y Xerox. En 1980 se alejó de la que fuera su iglesia, la Cristiana Pentecostal de la Biblia, y comenzó a organizar reuniones informales en su propia casa. Con el paso del tiempo logró crear una de las iglesias neopentecostales más populares y hacer crecer su comunidad, abriendo 300 iglesias en Brasil y Estados Unidos. Es el presidente de la Cadena de televisión Gospel. Además, en 1993 introdujo en Brasil la Marcha Para Jesús, una movilización cristiana ecuménica internacional que se realiza anualmente en miles de ciudades de todo el mundo.

Ha tenido una serie de conflictos legales: fue arrestado en 2007 por intentar ingresar a Miami con 57 mil dólares no declarados, escondidos en Biblias.60 También se la ha investigado por falsificación de documentación, lavado de dinero y fraude, aunque ha sido absuelto por el Supremo Tribunal de Justicia.

Cada municipio tiene un gobierno local autónomo, integrado por un alcalde (prefectos) y un órgano legislativo (Cámara Municipal). Ambos cargos son electos mediante voto directo y obligatorio.

2 Leonardo Desideri, “Três pesquisas convergem em indicar queda na popularidade de Lula”, Gazeta do Povo, 9 de marzo de 2024.

Marianna Holanda, “‘Todavía estamos lejos de lo que prometimos’, asegura Lula”, Folha de São Paulo, 12 de marzo de 2023.

4 Corresponde a la Justicia Electoral organizar, supervisar y determinar las elecciones del país, así como entregar los títulos que otorgan poderes a los candidatos elegidos. También es responsable de juzgar las irregularidades en las elecciones. La instancia más alta de la Justicia Electoral es el Tribunal Superior Electoral (TSE), cuya misión es estandarizar la ley sobre asuntos electorales, actuando también como un organismo normativo y consultivo en asuntos relacionados con el proceso electoral en Brasil. Sus principales competencias están definidas por la Constitución Federal y por el Código Electoral (Ley n° 4.737, del 15 de julio de 1965).

5 Brasil está dividida en cinco regiones: Sur, Sureste, Centro, Nordeste y Norte. La región Sureste es la más poblada (41,8% de la población del país) y está compuesta por los estados de São Paulo, Río de Janeiro, Minas Gerais —los tres más habitados de la nación— y Espíritu Santo. Le siguen el Nordeste (26,9%), el Sur (14,7%) y el Norte (8,5%). La región menos poblada es el Centro Oeste, con 16,3 millones de habitantes o el 8,02% de la población del país. Datos del Censo Demográfico de 2022.

Censo Demográfico 2022, Instituto Brasileño de Geografía y Estadística.

“Marçal cresce de 14% para 21% e empata com Boulos (23%) e Nunes (19%) na disputa pela Prefeitura de São Paulo”, Folha de São Paulo, 23 de agosto de 2024.

A principios de 2018, el entonces presidente Michel Temer decretó la supremacía del poder federal sobre el estatal en Río de Janeiro con el fin de controlar la escalada de violencia en ese estado. El general Walter Braga Netto encabezó la polémica intervención, en la que quedaron bajo su mando la Policía Militar, la Policía Civil, el cuerpo de Bomberos y las instituciones penitenciarias del Estado de Río de Janeiro. Posteriormente, Braga Netto ocupó el cargo de jefe de Gabinete y ministro de Defensa en el gobierno de Bolsonaro, volviéndose su compañero de fórmula en las elecciones presidenciales de 2022.

Varios medios, por ejemplo: Raphael Sanz, “Diretor da PF revela detalhes da espionagem da Abin de Bolsonaro sobre cidadãos brasileiros”, Forum, nota digital, 4 de enero de 2024.

10 “Eleições 2024 no Rio de Janeiro: Paes tem 49%; Ramagem, 13%; e Tarcísio, 7%, diz Quaest”, G1 Globo, 24 de julio de 2024.

11 Censo Demográfico 2010, Instituto Brasileño de Geografía y Estadística.

12 Aún no hay datos disponibles sobre grupos religiosos del último Censo Demográfico de 2022. Con base en los censos previos y en proyecciones anteriores, el demógrafo José Eustáquio Diniz Alves realizó la proyección “Transición religiosa en Brasil: 1940-2032”, EcoDebate, publicación digital, 19 de febrero de 2024.

13 Censo Demográfico 2010, Instituto Brasileño de Geografía y Estadística.

14 World Christian Database, Center for the Study of Global Christianity, citado en Michel Cunico, “La extraordinaria expansión del Pentecostalismo Global y sus dos narrativas”, Cuestiones de Pluralismo, vol. 4, núm. 1, marzo de 2024.

15 El evangelismo pentecostal nació en Estados Unidos a inicios del siglo XX y se extendió rápidamente en América Latina, Europa del Este, Asia y África, mostrando su adaptabilidad a contextos sociales diversos gracias a su vocación misionera y a su capacidad de sincretismo con otras expresiones espirituales de esas regiones del mundo. Esta vertiente del evangelismo enfatiza la relación directa del ser humano con Dios a través del sacrificio de Cristo y la comunión con el Espíritu Santo, sin la necesidad de intermediarios humanos o institucionales, tal como lo hace el protestantismo tradicional surgido de la Reforma del siglo XVI. La diferencia con éste último es que el pentecostalismo cree que los dones del Espíritu Santo (sanidades, milagros, profecías, discernimiento de espíritus, lenguas e in­terpretación de lenguas) expuestos por San Pablo en su primera carta a los Corintios (Capítulo 8, versículo 12) y manifestados el día de Pentecostés según el libro de los Hechos (Capítulo 2, de ahí el nombre de pentecostalismo) a los primeros cristisanos, siguen vivos y se manifiestan de manera sobrenatural para todos los creyentes, al contrario de la enseñanza de la mayoría de iglesias protestantes surgidas de la Reforma, que afirman que esas manifestaciones cesaron en el primer siglo de la Iglesia. Muchas veces se pueden encontrar referencias al cristianismo evangélico de tinte pentecostal como “carismático”, ya que la palabra “don” usada para referirse a los dones del Espíritu procede de la palabra griega charisma. Para una explicación de la teología pentecostal se puede ver: Gregg Allison, “Teología pentecostal”, Coalición por el Evangelio, ensayo digital, disponible en www. coalicionporelevangelio.com

16 Paul Freston, “Neo-Pentecostalism’ in Brazil: Problems of Definition and the Struggle for Hegemony”, Archives de sciences sociales des religions, vol. 44, núm. 105, enero-marzo de 1999, pp. 145-162.

17 Karen J. Brison, “Pentecostalism and Global Moral and Economic Systems” en Fijians in Transnational Pentecostal Networks, Canberra, Australian National University Press.

18 David Martin, Pentecostalism: The World Their Parish, Oxford, Blackwell Publishers, 2002.

19 “Pardo” es una de las categorías usadas por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) para referirse a uno de los cinco grupos de “color”, el de personas mestizas o de raza mixta. En su categorización en términos raciales también existen las categorías “negro”, “blanco”, “amarillo” e “indígena”. La categorización se realiza por autoidentificación. Fuente: David Martin, “Pentecostalism: An alternate form of modernity and modernization” en R. W. Hefner (ed.), Global Pentecostalism in the 21st Century, Indiana, Indiana University Press, pp. 37-62.

20 Ver el clásico estudio sociológico de Max Weber, La ética protestante y el espíritu del capitalismo, 1904. Se recomienda la edición crítica en español del Fondo de Cultura Económica de México (2012).

21 Ver, por ejemplo, Javier Calderón Castillo y Taroa Zúñiga, “Evangélicos, pentecostales y neopentecostales: de la fe a la política”, Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica, Análisis Político, ensayo digital, 13 de mayo de 2018.

22 Anna Virginia Balloussier, O Púlpito: Fe, Poder e o Brasil dos Evangélicos, Todavia, 2024.

23 Los resultados se comentan en Taylor de Aguiar, “O mapa da influência evangélica nas redes sociais: comentários sobre a pesquisa Radar Evangélico”, Observatorio Evangélico, 8 de octubre de 2003. El sitio de la consultora Nosotros es www.somosnosotros.com.br.

24 Felipe Betim, “La agria batalla entre Lula y Bolsonaro por el corazón (y el voto en 2022) de los cristianos evangélicos”, El País, São Paulo, 27 de junio de 2021.

25 Victor Araújo, “Surgimento, trajetória e expansão das Igrejas Evangélicas no território brasileiro ao longo do último século (1920-2019)”, Políticas Públicas, Cidades e Desigualdades, Centro de Estudos da Metropole, núm. 20, mayo de 2023.

26 Thiago Prado e Daniela Pinheiro, “Até onde vai Silas Malafaia no governo Bolsonaro”, O Globo – Época, 3 de diciembre de 2018.

27 Monica Bergamo, “Edir Macedo diz no Facebook que apoia Bolsonaro para presidente”, Folha de São Paulo, septiembre de 2018.

28 En 2020 fue detenido por la “Operación Tris en Idem” realizada por la Policía Federal en el marco de una investigación por casos de corrupción en la Secretaría de Salud del estado de Río de Janeiro.

29 Felipe Betim, op. cit.

30 Citado en Lamia Oualalou, “Los evangélicos y el hermano Bolsonaro”, Nueva Sociedad, núm. 280, marzo-abril de 2019.

31 49 Asamblea General Ordinaria de la CONFRADESP, “Carta Convencional”, São Paulo, 4 de octubre de 2022.

32 Es importante mencionar que la ley electoral brasileña de 1997 prohíbe la circulación de propaganda electoral de cualquier naturaleza en templos religiosos, ya que esos espacios son definidos como “bienes de uso común” —al igual que clubes, tiendas, gimnasios o estadios—. Cualquier alusión a un candidato político puede considerarse como propaganda electoral, regla que también abarca a medios de comunicación religiosos (las redes sociales no están sujetas a esta legislación, y por lo tanto, cualquier pastor, como persona física y no jurídica, puede expresarse libremente en ese ámbito).

33 Las investigaciones refieren a un intento de golpe de Estado luego de la derrota electoral de Bolsonaro en 2022, la venta de joyas recibidas como regalos de la familia real saudí, la creación de una red de espionaje ilegal en la ABIN, la falsificación de datos en libretas de vacunación, y la creación de milicias digitales.

34 “Malafaia discursa durante ato a favor de Bolsonaro na Paulista”, Poder 360, video disponible en la plataforma Youtube.

35 “Primer Comando Capital —PCC”, InSight Crime, reporte de investigación, 9 de marzo de 2020. Disponible en www.insightcrime.org

36 Josmar Jozino, “Chefe do PCC abriu 7 igrejas evangélicas com dinheiro do tráfico, diz MP”, UOL Noticias, 14 de febrero de 2023.

37 Entrevista publicada en el portal de información jurídica Jusbrasil: “Templos religiosos são o melhor lugar para se lavar dinheiro no Brasil”, Jusbrasil, 2016.

38 Entrevista “Expastor da Universal, André Constantine, revela o que testemunhou nos bastidores”, Cortes 247, disponible en la plataforma Youtube.

39 Diversos medios, ver por ejemplo: “Parlamentarios evangélicos critican a Lula por revocar una exención fiscal a los pastores”, Infobae, 18 de enero de 2024.

40 Juliano Spyer, O Povo de Deus: Quem são os evangélicos e por que eles importam, São Paulo, Geração Editorial, 2020.

41 Citado en J. Spyer, op. cit.

42 Christina Vital, Oração de traficante, Rio de Janeiro, Garamond, 2015.

43 Ver Gastón Calvo, “Una nueva encuesta revela que bajó la aprobación a Lula da Silva en Brasil”, Infobae, 6 de marzo de 2024.

44 Video publicitario “Fé No Brasil” disponible en la plataforma Youtube.

45 Ver “Lula repete Deus ou milagre 27 vezes, uma a cada minuto em discurso”, Folha de São Paulo, nota y video digitales, 5 de abril de 2024.

46 Ana Clara Costam, “A ausência evangélica”, Folha de São Paulo, 2 de enero de 2023.

47 Ver Frente Parlamentar Evangélica do Congresso Nacional, Cámara Legislativa de Brasil.

48 Ronaldo Almeida y Fabio Lacerda, “El perfil de los candidatos evangélicos electos a la Cámara de Diputados de Brasil y su comportamiento legislativo (2015-2019)”, en J. L. Pérez Guadalupe, Pastores & Políticos: El protagonismo evangélico en la política latinoamericana, Lima, Konrad Adenauer Stiftung-Instituto de Estudios Social Cristianos, 2022.

49 Ver minuto 14:40 del videoreportaje “Michelle Bolsonaro discursa e faz oração durante ato na avenida Paulista”, Poder 360, 25 de febrero de 2024, disponible en la plataforma YouTube.

50 Paraná Pesquisas, “Pesquisa de Opinião Pública”, resultados de encuesta nacional, publicados en enero de 2024.

51 Según Christianity Today y la consultora M&R Consultants. Ver Daniel Silliman, “El número de evangélicos supera al de católicos en Centroamérica”, Christianity Today, ensayo digital, 29 de marzo de 2023.

52 Taylor C. Boas, “Evangelicals in Latin American Politics”, Harvard Review of Latin America, vol. 20, núm. 2, 9 de febrero de 2021.

53 Ver Alexandre Meneghini, “Las iglesias evangélicas de Cuba recogen firmas contra la legalización del matrimonio homosexual”, Europa Press International, 16 de octubre de 2018.

54 Gabriel Luiz, Lucas Salomão y Gabriel Palm, “PF indicia pastor Silas Malafaia por lavagem de dinheiro na Operação Timóteo”, Globo, nota digital, 24 de febrero de 2017.

55 Naiara Galarraga Gortázar, “Silas Malafaia: ‘El Partido de los Trabajadores quiere volver a la escena del crimen’”, El País, 20 de septiembre de 2022.

56 Ariel Goldstein, “Las alianzas entre pastores y políticos de extrema derecha en Brasil y Estados Unidos”, PAPERS, artículo de investigación, Universidad Nacional de San Martín, documento disponible para descarga en www.unsam.edu.ar.

57 Tom Phillips, “Brazilian evangelical leader charged with fraud”, The Guardian, 13 de agosto de 2019.

58 Jarbas Aragão, “Pastor de megaiglesia en Brasil sufre atentado durante culto”, Mundo Cristiano, 1 de septiembre de 2017.

59 Franceli Stefani, “Dívida, bens penhorados e mais: os problemas do pastor Valdemiro na Justiça”, UOL Noticias, 7 de julio de 2022.

60 “Fundadores da Renascer estão detidos em presídio americano, diz consulado”, Folha de São Paulo, nota digital, 11 de enero de 2007.

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