En medio de una semana agitada para la agenda colombiana, el Comité Nacional Electoral (CNE) comenzó un proceso de investigación contra la campaña presidencial de Gustavo Petro en el 2022, con el fin de determinar si violó el límite de financiamiento. La discusión formal que estipula el CNE para determinar si se continúa o desestima la denuncia será el 16 de septiembre y en caso de proseguir implicará una plausible pérdida de la personería política de Colombia Humana y sanciones económicas al presidente.
Petro no tardó en responder mediante una conferencia de prensa, alertando que “hay un golpe en camino financiado por la mafia” y que su seguridad está bajo en peligro; advertencias que luego se profundizaron en su perfil de X, donde responsabilizó a “la oligarquía colombiana que no se cansa de ordeñar el país” y acudió al llamado a la movilización popular: “Convoco a ese gigante dormido, al pueblo colombiano”. Desde la oposición algunas figuras como Catherine Juvinao, representante de la Alianza Verde, afirmaron que la “teoría del golpe de Estado es ridícula”, al igual que la Corporación Excelencia la Justicia (CEJ), organización no gubernamental vinculada a importantes empresas y cámaras del país, las cuales rechazaron las declaraciones de Petro: “Denotan una alta desconsideración por la institucionalidad, al igual que el deseo de socavar la división de poderes”.
Mientras avanzaban las últimas noticias de la instrucción del CNE, comenzaron las investigaciones por la denuncia realizada la semana pasada por el presidente sobre la compra del software israelí Pegasus, adquisición que habría realizado el Estado colombiano durante la misma campaña para espiar celulares. Aunque algunos sectores descartan el uso del software, la Procuraduría General avanza en la investigación y ya incorporó la carta que llegó a la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF) sobre el tema. Se busca comprobar si la Dirección de Inteligencia Policial (Dipol) negoció la compra de Pegasus con la firma israelí NSO Group. Por su cuenta, Petro anunció que tratará de contratar “un servicio especializado que detecte rastros de infección del ‘pegasus’ en los teléfonos de la ciudadanía” y llamó a la población a consultar las posibles infiltraciones en una página de verificación de móvil.