Javier Milei, presidente de Argentina, generó controversia en el Foro Económico Mundial, celebrado en Davos, Suiza, entre el 20 y el 24 de enero. Milei se alejó de los temas económicos habituales, centrándose en la “batalla cultural” contra lo que denominó “wokismo” (derivado del inglés woke o “consciente”), tendencia que calificó de “epidemia”; criticó conceptos como feminismo, diversidad e ideología de género, argumentando que son parte de un esfuerzo para justificar el aumento del control estatal. Afirmó que la ideología de género constituye “abuso infantil”, citando como ejemplo un caso extremo en Estados Unidos, y lanzó sus comentarios más polémicos contra la comunidad LGBTIQ+.
Estas declaraciones provocaron una ola de críticas en redes sociales y entre políticos de diversas corrientes. Maximiliano Ferraro, presidente de la Coalición Cívica, condenó el discurso de Milei como una forma de apartheid, argumentando que un presidente no debería usar ejemplos extremos para descalificar a la comunidad LGBTIQ+. Pablo Avelluto, exministro de Cultura, respaldó a Ferraro y criticó el silencio de otros miembros del partido Propuesta Republicana (PRO) ante las declaraciones del presidente.
La diputada radical Karina Banfi planteó una contradicción en el discurso de Milei, sugiriendo que debe decidir si es un liberal que defiende los derechos individuales o un totalitario que persigue a quienes disienten. Esteban Paulón, diputado socialista y activista por los derechos LGBTIQ+, calificó las acusaciones de Milei como crueles y maliciosas, defendiendo el derecho a vivir la identidad de género con libertad.
Julia Strada, diputada de Unión por la Patria, también criticó fuertemente a Milei por vincular homosexualidad con pedofilia y recordó que hace un año había negado las brechas salariales de género. Anabel Fernández Sagasti, senadora del mismo partido, subrayó que el discurso del presidente refleja un intento de retroceder en los avances sociales logrados en las últimas décadas.
Myriam Bregman, diputada del Frente de Izquierda, anunció su intención de presentar una denuncia formal contra Milei por sus declaraciones. En su mensaje en redes sociales, enfatizó que la violencia de género es un problema real y que las palabras del presidente pueden llevar a ataques concretos contra las mujeres.
Finalmente, Danya Tavela, diputada por la Unión Cívica Radical, se unió a las críticas afirmando que las palabras del mandatario demuestran una preocupante visión sobre la igualdad. Subrayó que vincular la lucha por los derechos LGBTIQ+ con conceptos como abuso infantil no solo carece de fundamento, sino que también fomenta el odio y la discriminación.