El Parlamento nicaragüense reformó la Ley 761 o General de Migración y Extranjería, facultando al gobierno para negar la entrada o salida de ciudadanos, extranjeros residentes y visitantes extranjeros a Nicaragua. La modificación también legaliza los destierros que el gobierno ha aplicado en los últimos años a unas 450 personas acusadas de “conspirar” contra el gobierno, a quienes arrebató la …