Desde hace semanas, Martinica, una isla caribeña y departamento de ultramar de Francia, se encuentra sumergida en una oleada de protestas por la carestía de la vida. Los elevados precios de los alimentos desencadenaron una revuelta que ha incluido cortes de rutas, bloqueos en el puerto Fort-de-France –capital de la isla– y enfrentamientos entre manifestantes y la policía.En una semana …