Los recientes incendios forestales en Córdoba han desatado una intensa controversia política, con el gobierno de Javier Milei acusando a opositores de ser responsables. En medio de un panorama desolador, con más de 43 mil hectáreas devastadas, Milei y sus aliados han promovido la narrativa de que militantes de La Cámpora están detrás de los fuegos. Sin embargo, las autoridades provinciales han desmentido estas afirmaciones, confirmando que hay 11 detenidos, ninguno de los cuales tiene afiliación política conocida.

La campaña de desinformación ha sido alimentada por figuras cercanas al presidente, como el influencer Daniel Parisini (Gordo Dan en redes sociales), quien utilizó una serie de fake news para difundir la idea de que los incendios son parte de un acto terrorista del kirchnerismo. Este tipo de retórica ha encontrado eco en otros miembros del gobierno y en cuentas afines, quienes han compartido imágenes manipuladas para reforzar su mensaje.

A pesar de estos intentos de vincular a la oposición con los incendios, las declaraciones oficiales contradicen estas afirmaciones.

El portavoz presidencial, Manuel Adorni, intentó justificar las acusaciones afirmando que habían indicios de intencionalidad en los incendios. Sin embargo, su respuesta fue vaga y generó más confusión sobre la situación real. Las autoridades locales y el fiscal general han reiterado que no hay evidencia que respalde la conexión entre los detenidos y La Cámpora, lo que pone en duda la narrativa promovida por el gobierno.

A medida que se controlan algunos focos activos, persiste la preocupación por el impacto ambiental y la seguridad en la región. Los funcionarios han señalado que muchos incendios son causados por prácticas agrícolas irresponsables, como quemas que se descontrolan debido a condiciones climáticas adversas. Además, se ha negado cualquier relación entre los incendios y proyectos inmobiliarios futuros.