Las elecciones presidenciales de 2024 en Estados Unidos continúan acaparando la atención nacional, especialmente con el inicio de la votación anticipada en estados clave como Arizona y Georgia. Las encuestas muestran una carrera muy ajustada entre Donald Trump y Kamala Harris, con los votantes divididos sobre temas cruciales como la economía, el aborto y la inmigración. Trump mantiene una leve ventaja en la confianza de los votantes sobre la gestión económica y la seguridad fronteriza, mientras que Harris supera en temas como el aborto y la igualdad racial. Según un promedio de encuestas nacionales, Harris lidera ligeramente con un 49% frente a un 47% de Trump.
En los estados clave o battleground states, la contienda está aún más indefinida, con ambos candidatos empatados o separados por márgenes mínimos. Cabe resaltar que según el promedio de los relevamientos, Harris tiene un punto de ventaja en el estado de Pensilvania, que cuenta con 19 votos electorales y ha tenido un rol central en la historia electoral del país como swing state (compone junto con Michigan y Wisconsin el “muro azul”), entidad en la que Trump fue el primer republicano en ganar desde la década de los ochenta.